Viajar en tiempos de crisis






Llevamos meses hablando y oyendo hablar de la crisis que sacude no sólo nuestro país, sino prácticamente todo el planeta. El paro ha aumentado significatívamente tanto por aquellas personas que han perdido su puesto de trabajo, como por la oleada de emigrantes llegada desde otros lares, buscando mejorar sus vidas, y que no encuentran el dorado que desde las tierras del otro lado del oceano les prometieron y pensaron que lograrían alcanzar. Las hipotecas continuan estancadas, incluso en algunos casos han aumentado, a pesar de la bajada de los tipos de interés y todo el mundo se queja de lo mal que marchan los negocios. Sin embargo resulta difícil conseguir billetes de avión y en algunos destinos turísticos las ofertas están ya cubiertas.


El fín de semana pasado se celebró en Madrid, la fería de turismo concida como FITUR. Los dos primeros días estuvo dedicada a los profesionales del sector, pero los dos últimos fueron de acceso al público en general y todos los pabellones se encontraron llenos a rebosar. La afluencia fue masiva hasta el punto de que por momentos era casi imposible caminar por algunos de sus pasillos, y las colas de entrada se prolongaban hasta fuera del pabellón número dos que era el que permitía el acceso.






Algunos de los stands pertenecían a empresas minoristas del sector, que ofertaban recorridos por distintos paises exóticos de los cinco continentes y que podían ser contratados in situ. No se si hicieron o no negocio, pero lo que si se es que en todo momento tuvieron potenciales clientes revisando la documentación que allí exhibían.








Me llamo mucho la atención el hecho de que muchas de las personas que acudieron a la fería llevaban con ellos pequeñas maletas que fueron llenando en su recorrido con catálogos, planos, tarjetas y algunos suvenirs de los distintos recintos. Es difícil saber cuantas de esas personas realizarán un viaje a cualquiera de los paises de tan variada oferta, pero tal vez durante unas horas mientras revisan en sus casas las fotos de los lujosos hoteles de Sri Lanka, de las paradisiacas playas de los mares del sur, de los safaris fotográficos por Kenia y Tanzania o de los dorados templos de la India y Nepal, consigan viajar con la mente y el corazón y ovidar la maldita crisis con que nos desayunamos cada día de la semana.
.


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares